Aunque los médicos mi familia, amigos y yo luchamos por mi supervivencia los negociantes de droga de las EPS intentan que me muera y eso es lo que me da coraje y les peleo y lo haré hasta el último segundo, agradezco la colaboración de gente maravillosa en la unidad de cancerología de Neiva, a la gentil Carolina, a la jefe Leidy Aranzazu, al amigo Andrés y a todos los que sin tener por qué hacerlo me colaboran, solo el tiempo dirá lo que se gana sirviendo al necesitado, me llegó la droga, muchas gracias, que lio, creí que me la entregaban en Florencia siendo la misma negociante Colsubsidio y nada, tuve que pedir ayuda.
Hace días no dejaba mis cuitas en el muro, he tenido contratiempos, se me quemó la tarjeta de video, después otra, en fin, eso es solucionable, lo malo es trabajar en aparatos prestados así sea en la casa, agradezco la visita de amigos entrañables, a Silvio, Juvenal Martha, lamento la tragedia familiar de mi consentida Gloria amparo, Dios les de fortaleza, en fin me siguen trayendo libros, frutas detalles con generosidad que no entiendo, solo atino, Dios les pague.
Han vuelto por interno unos amigos pacientes que a veces desmayan, por favor no, no desmayen, eso es letal, adelante, fortaleza, no les de pena, si no escriben público no importa, por interno, tengo todo el tiempo del mundo, agradezco al loquillo Wilmer Rua y al director John Fredy en la emisora de Uniamazónia por permitirme ladrar en su maravilloso espacio de opinión con tanta audiencia y fuerza de observación regional a los amigos de armonías Doctora Bertha lucia, Juan Benito y amigos que no me abandonan y dicen el espacio está abierto, esperemos la santa no me deja trabajar y yo obedezco, soy un varón.
Insisto en un tema que preocupa a opositores y algunos amigos, por qué mi estilo de critico periodístico, (no es resentimiento, es civismo, es honestidad, tengo lo mínimo digno para morir mañana con alegría, cuantos con mucho y la vergüenza de traicionar su casa?) es que no puedo tener otro estilo, me duele un pueblo maravillosos como mi pueblo Florencia y el Caquetá, aquí no tenemos gobernantes tenemos raposas, delincuentes cuyo objetivo no es el desarrollo regional sino su bolsillo, eso les duele y a mí no me da ganancias, cuando me entierren alguien dirá se acabó la cantaleta sigamos por lo mismo.
Un abrazo con mucho amor, espero alcanzar a ver gobernantes con sentido de pertenencia, respeto por su pueblo y no reos dignos de picota.
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